¿Cómo detectar problemas de salud mental en la empresa?

Según la Organización Mundial de la Salud, se calcula que en todo el mundo se pierden 12 000 millones de días laborables por depresión y ansiedad, con un coste de 1 billón de euros al año en pérdida de productividad. 

Abordar la salud mental en el lugar de trabajo de manera abierta y empática es fundamental para crear entornos laborales más saludables y productivos. Si equipamos a los empleados y sus managers con los recursos y el apoyo necesarios, las empresas pueden desempeñar un papel vital en la normalización de la diálogo sobre la salud mental y en la eliminación del estigma asociado.

Las lesiones físicas suelen ser más visibles y, por lo tanto, más fácilmente reconocibles por los empleadores y colegas. Sin embargo, los problemas de salud mental pueden ser menos evidentes y a menudo pasan desapercibidos, lo que hace que sea más difícil identificar y abordar adecuadamente.

Una detección a tiempo requiere de un gran esfuerzo de atención para percibir los sutiles cambios en las formas de pensar, en los sentimientos, en las conductas y en los estados de ánimo de las personas, ya que muchas veces los “síntomas” no son tan obvios. 

Y entonces, ¿cómo podemos detectarlos?

La respuesta afirmativa a una o varias de las siguientes preguntas, pueden darte algunas pistas:

  • ¿Se evidencia una mayor irritabilidad, o mayor reclusión, o cambios bruscos de ánimo?

  • ¿Muestra una preocupación excesiva por algunos temas? (o tristeza o miedo…)

  • ¿Cuesta que se concentre o recuerde los temas importantes del día a día?

  • ¿No quiere participar en actividades que antes disfrutaba?

  • ¿Tiene dificultad para mantener una buena relación con las personas del equipo?

  • ¿Se perciben cambio en el cuidado personal? (aseo, apariencia, etc)

  • ¿Ha disminuido su rendimiento laboral sin causa aparente?

  • ¿Tiene más absentismo o llegadas tarde de forma recurrente?

Identificar algunos de estos casos puede ayudar a detectar una oportunidad para dialogar con la persona sobre las causas subyacentes a lo que se ha identificado.

Tratar estos temas de forma abierta e inclusiva, reconocer que es algo dinámico y nada sobre lo que tengamos que estigmatizar, ayuda a crear una cultura en la que se aborden estos problemas con el cuidado y la empatía necesarios, y es crucial para el bienestar general de los empleados y el éxito de las empresas. 

La implementación de programas de salud mental en las empresas han evidenciado una serie de beneficios como:

  • Mayor productividad

  • Menor tasa de rotación de personal

  • Mejora en la moral y la atmósfera de trabajo

  • Aumento del compromiso general de los empleados

Dentro del concepto de salud mental, el área de desarrollo que mejores resultados está demostrando obtener es el Mental Fitness. Se refiere a la capacidad de una persona para mantener una buena salud mental, una mentalidad positiva para enfrentarse a los retos de la vida.

Los programas de mental fitness implementados en las empresas han demostrado generar un impacto muy positivo en el bienestar y el rendimiento de los empleados de la compañía, con una reducción significativa de los casos de burn-out, estrés, ansiedad, depresión y conflictos relacionales en el trabajo. Es, por tanto, una estrategia efectiva para ayudar a prevenir y paliar los problemas de salud mental en las empresas.

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