El saboteador perfeccionista
Los saboteadores son submodalidades de la personalidad. Patrones mentales negativos que te frenan y te limitan, afectando a tus pensamientos, sentimientos y comportamiento. Son voces internas que actúan basándose en el miedo, las dudas sobre uno mismo y la autoreferencias negativas. El Saboteador Perfeccionista destaca por su insistencia en que todo ha de estar perfecto, por la rigidez y el miedo a cometer errores. Algunos lo tenemos más presente que otros.
En este artículo te explicaremos más sobre este saboteador y algunas estrategias eficaces para minimizar su influencia negativa.
Características del Perfeccionista
El Saboteador Perfeccionista se nutre de una necesidad extrema de perfección, orden y organización, llevando a menudo estas tendencias a niveles poco saludables y que genera un impacto negativo tambien en los demás. Aunque es puntual y organizado, puede ser irritable, tenso, testarudo y sarcástico.
Impulsado por la creencia de que los demás son descuidados o perezosos, está dispuesto a trabajar horas extras para asegurarse de que las cosas se hacen «como se deben hacer». Sin embargo, esto tiene un coste: ser muy crítico consigo mismo y con los demás, con una fuerte necesidad de autocontrol, lo que puede causar problemas en las relaciones y en la salud.
La función de supervivencia original del Perfeccionista
El Saboteador Perfeccionista intenta acallar la voz constante del autojuicio y el miedo al juicio de los demás esforzándose por alcanzar la perfección. Impulsa la creencia de que, haciéndolo todo bien, puede evitar las interferencias y las críticas de los demás, que es una manera de evitar sentir “vergüenza”.
La perfección y el orden ofrecen una breve sensación de alivio, especialmente cuando alguna vez ayudaron a crear orden en una dinámica familiar caótica. Aquello ayudó al niño que fuimos a que sea irreprochable y perfecto y a ganarse la aceptación y la atención de unos padres emocionalmente distantes o exigentes.
¿Cómo reconocer cuando el perfeccionista está al mando?
Esto es lo que hay que tener en cuenta cuando el Perfeccionista intenta imponerte sus mentiras y creencias limitantes.
El Perfeccionistsa provoca rigidez y reduce la flexibilidad a la hora de afrontar los cambios y los estilos de los demás. También es una fuente de ansiedad y frustración continua que provoca resentimiento, dudas de sí mismo y resignación en los demás, porque se sienten continuamente criticados y se resignan a que, por mucho que se esfuercen, nunca podrán complacer al perfeccionista.
Pensamientos que provoca
Lo está bien está bien y lo que no, no.
Conozco el camino correcto.
Si no puedes hacerlo bien, no lo hagas.
Los demás son poco rigurosos.
Tengo que ser más organizado y metódico que los demás para que las cosas salgan bien.
Odio los errores.
emociones y sentimientos que provoca
Frustración y decepción constantes con uno mismo y con los demás por no cumplir las normas ideales.
Ansiedad ante la posibilidad de que otros estropeen el orden y el equilibrio que he creado.
Ira y frustración reprimidas.
Mentiras que nos dice
Se trata de una obligación personal.
Me corresponde a mí arreglar cualquier desastre.
El perfeccionismo es bueno, además me hace sentir mejor conmigo mismo.
Suele haber una forma clara de hacer las cosas, una correcta y otra incorrecta.
Sé cómo deben hacerse las cosas y me corresponde hacer lo correcto.
¿Cómo reducir el impacto de estos sabotages?
Ordena a esa voz a que calle o se haga a un lado.
1. Lo primero que debes recordar es que si estás en una emoción negativa por más de un segundo, estás en modo Saboteador. Debes etiquetar tus pensamientos y emociones en ese momento como saboteados y dejarlos ir. Para poder hacerlo, necesitas haber estudiado a tus Saboteadores (incluyendo al Perfeccionista) y haber desacreditado sus mentiras y creencias limitantes. Sino lo has hecho aún, haz el test de Saboteadores para empezar.
2. El siguiente paso es realizar unos ejercicios de centramiento o mindfulness a los que -en Inteligencia Positiva- llamamos “PQ reps”, que consiste en concentrarnos durante al menos 10 segundos en uno de tus sentidos (oído, vista, tacto, o la respiración). Estos ejercicios representan una eficaz forma de ordenar a tu mente que calme la región donde viven tus Saboteadores y que conecte con otras cualidades que son más positivas. Cada vez que te des cuenta de que tu Saboteador Perfeccionista está al mando -o a tus otros Saboteadores-, repite estos ejercicios para recuperar el mando de tu mente y elegir una respuesta más positiva.
Minimiza la influencia del Perfeccionista
Además de pillar al Perfeccionista cuando este ha tomado el mando y realizar los PQ reps, puedes probar estas prácticas para minimizar la influencia negativa de este Saboteador en tu vida:
Practica la autocompasión: Cultiva la autocompasión tratándote a ti mismo con amabilidad, comprensión y aceptación, especialmente durante los contratiempos o desafíos. Sé amable contigo mismo y reconoce tus esfuerzos.
Celebre los progresos: Reconoce y celebra las pequeñas victorias, los progresos y los logros a lo largo del camino. Reconoce el esfuerzo y el crecimiento que supone superar los retos.
Busca apoyo: Rodéate de personas que te apoyen y fomenten el crecimiento, la creatividad y la resiliencia. Busca mentores, coaching, asesoramiento o apoyo de compañeros para superar los retos de forma eficaz.
Aprende de tu errores: Cambia tu perspectiva sobre los errores como valiosas oportunidades de aprendizaje. Extrae lecciones, ideas y crecimiento de cualquier error o fallo y aplícalos a futuros proyectos o situaciones en tu vida.
Conclusión
Aunque el Saboteador Perfeccionista pueda imponer normas rígidas y miedo al fracaso, puedes debilitar su influencia mediante prácticas intencionadas que promuevan la flexibilidad, la autocompasión y una mentalidad de crecimiento. A medida que desarrollas tu entrenamiento mental y domesticas al Saboteador Perfeccionista, vivirás una vida más satisfactoria y plena, a la vez que cultivas tu crecimiento y resiliencia.
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